Lo que no me gusta de mi ciudad

A toda la mala imagen que rodea al portador de un pasaporte peruano en el exterior se le ha agregado ahora -gracias a la televisión- un elemento adicional. ¿Tenían dientes ustedes? suelen preguntanos algunos colegas cuando reconocen nuestro origen.
¿Cómo es una "pollada"? agregan al instante tras recordarnos que esa palabra la escucharon en uno de los programas que a diario se transmite por todo EE.UU. y parte de América Latina a través de Univisión. Estas escenas no llegan al Perú pero igual le afectan.
Mucha gente cree que los peruanos nos comportamos como este grupo de actores que Laura pone en escena. La secuencia fue filmada en un hotel de Nueva York. Todos los programas de Laura Bozzo son iguales; patéticos y ajenos a nuestra realidad. Pero igual se producen en Lima gracias a sus ingeniosos productores y la corte de "invitados" que desde los lugares más recónditos de la ciudad acuden hasta los estudios de Monitor para aportar su cuota de dramatización al programa, previo pacto con la producción.
De otro forma no se entendería porque Laura promueve temas tan disparatados como el que veremos líneas abajo. "Mi jefe me acosa" dice el titular del programa. Este se presenta y da su versión tras la denuncia de la supuesta víctima. Pero luego la esposa del jefe también acude al canal y da su versión. Y mientras Laura con las miradas asolapadas a sus "invitados" pretende darle curso a la secuencia, el golpe, el llanto sin lágrima o los gritos descabellados matizan el escenario. El corolario viene luego con la reflexión de la mesurada conductora y el regalo del carrito "sanguchero" a la víctima (a estas alturas McDonalds, Bembo's, Burguer King y otras sandwicherías conocidas en la ciudad ya hubieran fracaso de tanta competencia con los "carritos sangucheros", pero la línea del programa es esa. Vender escándalo a como de lugar y "mostrar" la cuota de "responsabilidad social" hacia el país. La promoción de nuestra imagen en el exterior (los estrategas de PromPerú deben envidiarla) se genera mientras la conductora sigue acudiendo a los tribunales para explicar sus oscuras relaciones con quien fuera el ex asesor del corrupto gobernante Alberto Fujimori. Vladimiro Montesinos fue un gran amigo de ella y hasta hoy siguen cruzando miradas%

¿Cómo definen los gringos a la cultura combi? En Wikipedia hay una definición interesante que nos hará reflexionar respecto a cómo aprecian desde el exterior el servicio de transporte público que desde la época de Fujimori y Belmont soportamos los peruanos gracias a los excesos del liberalismo económico.

En Wikipedia señalan que los choferes de combi y micros son conocidos por diversos factores:

• Ser irrespetuosos frente a las leyes de tránsito.
• Se detienen en cualquier lugar de la calle para recoger pasajeros o compiten entre sí para ganar más pasajeros.
• No realizan mantenimientos preventivos en sus vehículos y el pasaje es barato.
• Usan indiscriminadamente la radio y el relajo existente entre conductores y cobradores de combi han creado la llamada cultura combi, que es sinónimo de clandestinidad.

“Micro and combi drivers are known for being irrespectful of traffic rules. They will stop at any part of the streets to pick up passengers and will race other micro drivers to be able to get more passengers. This, combined with the lack of vehicle maintenance, the low prices, salsa music on the radio and the overall relaxed feeling in the micros, has created the so-called "combi culture", which today is a synonymous of clandestinity”.

Yo le agregaría más cosas. Y en eso ando en Wikipedia.

• Suelen retirarle los asientos originales para incorporar más "espacio" para los pasajeros.
• Los cobradores suelen caracterizarse por ser extremadamente avezados.
• Algunos han incorporado luces de neón y vidrios polarizados (en la zona del conductor) para evitar ser identificados.
• Suelen colocar unos aditamentos de fierro en la parte frontal (conocidos aquí como mataperros) para poder golpear a otro sin sufrir daños en la carrocería.
• Los tableros de control suelen llevar adornos, estampitas y calcomanías que hacen gala de la personalidad del propietario o conductor de la unidad.

Si desean agregar más datos pueden visitar Wikipedia en Inglés en http://en.wikipedia.org/wiki/Combi

No acostumbro abordar temas políticos pero lo visto este martes 22 de agosto en la señal de Canal N es realmente vergonzoso. Un grupo de empresarios israelíes, que en la víspera había llegado al país como parte de una misión de negocios, tuvo que esperar durante una hora y diez minutos la llegada del presidente Alejandro Toledo. La espera resultaba incómoda para ellos, sus anfitriones peruanos y los periodistas que aguardaban su llegada para las 12:30. Pero Toledo llegó al Salón Dorado de Palacio de Gobierno junto con su esposa y el resto de su comitiva. Y en ningún momento pidió disculpas por la tardanza. La escena fue captada en vivo por Canal N y la verguenza resultó ajena porque tanto periodistas como televidentes peruanos sintieron aquello ante las escenas de hombres de negocios esperando el arribo del presidente.
La impuntualidad del gobernante peruano en los actos oficiales es ampliamente conocida, pero jamás había imaginado que procedía de la misma forma con visitantes extranjeros interesados en invertir en el Perú. ¿Así pretende atraer inversionistas foráneos a un país donde la "hora Cabana" la institucionaliza el propio presidente? ¿Creerán los empresarios israelíes que los peruanos somos iguales de impuntuales y descorteses en las reuniones de trabajo?

Cada vez que uno conduce por la Vía Expresa se encuentra con unas sorpresas alucinantes. El vehículo de la foto es uno de los miles que a diario circula por el país sin que algún Policía de Tránsito se anime a ponerle una papeleta de infracción por violar normas tan básicas como tener autorización para usar placas oscuras o llevar la matrícula del vehículo. Aquí no pasa nada porque sencillamente quien conduce es un policía y entre colegas existe el llamado espíritu de cuerpo que impide sancionarse entre ellos. ¿Miento? Solo recuerden el poderoso Honda de color rojo que manejaba hasta hace poco la ex escolta del presidente Alejandro Toledo, Lady Bardalez.
No tenía placas, carecía del Seguro Obligatorio (SOAT) y encima la conductora no tenía licencia para manejar un automóvil. La víctima del atropello tuvo que denunciarla ante la prensa para que la PNP recuerde que debió retener ese vehículo en la Comisaría.

Se estima que un 70 por ciento de los jóvenes limeños se quieren ir del país. Y razones no les faltan. Argumentan falta de empleo, oportunidades y una serie de hechos que provocan en muchos las ganas de irse en busca de un futuro mejor. Pero hay casos y sedes, como las del consulado de España en San Isidro, que realmente lindan con lo absurdo y grotesco. Diariamente se reúnen decenas de personas en busca de la añorada visa a la Madre Patria. Pero señores tengan algo de dignidad. Dormir en la calle para viajar a un país europeo, que valgan verdades no es el mejor en el viejo continente, no merece tanto sacrificio. Hay de por medio intentos por ordenar estas escenas y se espera que el caos y desorden en San Isidro ya no sean sinónimo de caminar por el cruce de la avenida Jorge Basadre y la calle Los Pinos.

¿El lugar? La zona de carga y descarga de Metro de Chorrillos (justo frente a la puerta principal). ¿El día? Un sábado de diciembre? ¿El motivo? El señor David Waisman y su hijo se engullían un pollo entero dentro de la zona de comidas del Metro de Chorrillos. Su escolta (la misma que a diario se nos cruza por el camino obligando a todos a detenernos con el semáforo en verde para que pase "el rey", perdón el funcionario público) no encontró mejor forma de esperarlo que estacionándose en una zona de estacionamiento temporal para guardar las cosas que uno compra en la tienda. Pero como era el vicepresidente del Congreso y tenía escolta nadie pudo ni se atrevió a decirle que esa era zona prohibida. Y así quieren que en el Perú se cumplan las normas y las leyes cuando ellos ni siquiera dan el ejemplo.